Durante el último siglo, las escuelas Waldorf se han establecido en todo el mundo. Están unidas en el enfoque pedagógico, pero distribuidas en diferentes geografías, culturas y contextos. Este artículo critica el modelo arborescente de un currículum Waldorf único, original, auténtico e histórico que a menudo ha sido «trasplantado» como «exótico» en otros espacios culturales y geográficos, sugiriendo en su lugar la metáfora botánica Deleuzoguattariana de un proceso emergente, rizómico, que permite el desarrollo de especies «nativas». Un breve estudio de la historia del currículum Waldorf sugiere que los currículums arborescentes son inapropiados e inadecuados cuando se trata con los factores de tiempo y espacio. La necesidad de adaptar y modificar el currículum Waldorf es tanto intrínseca, dada la necesidad de tener en cuenta las diferencias culturales, como extrínseca, en respuesta a los grandes retos sociales, económicos y ecológicos a los que nos enfrentamos hoy en día. Las políticas educativas neoliberales de desempeño y estandarización exigen cada vez más que las escuelas Waldorf demuestren sus resultados educativos de forma mensurable, lo que puede amenazar la autonomía del currículum. Al explorar lo que podría comprender una red rizómica común, los autores creen que este modelo puede ayudar a que las escuelas Waldorf recontextualicen el currículum en sus propias situaciones y superen las tradiciones eurocéntricas discernibles.
Palabras clave: Rizómico, emergente, currículum estratificado, currículum, eurocentrismo